El Forjista
Hay una situación que se repite anualmente en la ciudad de Buenos Aires, miles de niños y niñas se quedan sin vacantes en los colegios de la ciudad, este año la cifra rondó los 20.000 chicos y chicas que quedaron sin posibilidad de inscribirse.
El desprecio del gobierno del PRO por todo aquello que sea público se refleja notoriamente en todos los niveles de la educación.
En la campaña electoral de 2015, Mauricio Macri prometió la construcción de 3.000 jardines de infantes, obviamente fue otra de las promesas incumplidas de Cambiemos.
Precisamente en la ciudad que fue gobernada por Macri, son más los niños y niñas que concurren a jardines privados (52,32%) que aquellos que lo hacen a establecimientos públicos (46,68%).
Esta situación se da en todos los niveles, en las escuelas primarias son apenas un poco más las chicas y chicos que concurren a establecimientos públicos (52,21%), en tanto que el 47,79% lo hacen en escuelas privadas, pero esta es una cifra que está creciendo precisamente por la falta de vacantes.
Mientras que en los colegios secundarios la situación, también predominan los alumnos que van a establecimientos privados (50,53%), mientras que lo hacen a colegios públicos el 49,47%.
Estos porcentajes corresponden al año 2020, así que es posible que se hayan modificado un poco, porque cada año son más los alumnos que quedan sin vacantes, sin que el gobierno de la ciudad haga algo para remediar la situación.
La privatización de la educación en un anhelo de la derecha que ahí donde hay un derecho, en este caso a la educación, ve la posibilidad de realizar negocios, y ya está logrando que la mitad de los que concurren a establecimientos educativos lo hagan a entidades privadas.
El PRO pretende que nuestros niños, niñas y adolescentes se eduquen en la cultura del egoísmo y el individualismo, y desconfíen de la solidaridad, a eso apunta esta paulatina privatización de la educación.
No es casual que la actual ministra de Educación de la ciudad, Soledad Acuña, se haya educado en Bariloche en un colegio de la colectividad alemana que tenía por directivo al genocida nazi Erich Priebke.
Cada declaración de la ministra es para una antología de la discriminación y desprecio por los más humildes, un sentimiento y una actitud compartida por casi todos los integrantes de Juntos por el Cambio.
También hay que recordar cuando Macri habló de “caer en la educación pública”, esa es la concepción de Juntos por el Cambio, con una oligarquía concurriendo a costosos colegios privados, y el resto de la población embrutecida e indolente por una educación deficiente y medios de comunicación para adormecer las mentes con su constante campaña de desinformación.
Es esa la razón que la derecha ha elegido a los docentes como sus principales enemigos, a los que ha despreciado, perseguido y reprimido, porque muchos de ellos, no todos, son un dique de contención al proyecto embrutecedor de la derecha.
Así es como en esta ciudad, al predominio de la prensa oligárquica debe sumarse la constante privatización de la educación, y así se puede entender que el PRO ya haya gobernado por cuatro mandatos y que la ciudad haya dado al país a los dos peores presidentes de la democracia que precisamente fueron jefes de gobierno en CABA.